Roma y el arte de la guerra (2)

Mario, al reformar el ejército romano, uniformó el armamento de los legionarios y cambió su táctica, buscando, sobre todo, la consecución de un efecto de masas. Aumentó los efectivos de la legión, de tres mil a seis mil infantes, repartidos en seis cohortes organizadas de tal modo que pudieran actuar, llegado el caso, como pequeñas unidades independientes. El apogeo de la legión romana se produce en el período que va de Mario a César. Absolutamente todo estaba previsto: desde la dieta alimenticia hasta el uniforme. El legionario vestía una túnica de lana, sin mangas, y botas altas de cuero. Durante las campañas, llevaba también una capa. Como armas defensivas tenía el casco, la coraza, el escudo; las de ataque eran: el venablo, la espada y, a veces, la lanza. Uno de los principales motivos de orgullo de cada legión era su campamento, que cada soldado había ayudado a construir y que aseguraba la protección ante el enemigo. Pero los romanos destacaban también en el...

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